Llegó el día que tenía marcado desde hace mes y algo (por eso de hacer más llevaderos los lunes...) Y después de unas semanas que se me han pasado volando, para que engañarnos, hoy empiezan mis ansiadas vacaciones de Semana Santa. Como os conté, serán de relax total y absoluto. Y ese relax significa también vacaciones blogeras, porque no sé donde pasaré estos días (hay múltiples opciones) todas ellas sin Internet. Así que sin más dilaciones... me despido de vosotras. Deseo de todo corazón que paséis unos buenos días, os relajéis, y si sois de procesiones las disfrutéis al máximo. Yo prometo hacerlo... porque en estos diez días se producirá un importante cambio en mi vida... dejo atrás una década, y me adentro en otra. Y me da pavor. No quiero que llegue el próximo sábado. Cumplir años es algo que llevo fatal desde los dieciocho... y los hice hace dos días... así que imaginad. Pero para compensarlo, habrá celebraciones múltiples, con lo que me gustan a mi los fastos de cumpleaños.
Y... no puedo acabar, sin dejaros estas imágenes tan primaverales.
Nos vemos el martes 6, a primera hora de la mañana, como siempre. Con las pilas cargadas, y muchas ganas de contar cosas, descubrir y aprender como hasta ahora. Prometo contaros que tal los fastos, las celebraciones y los regalitos.
Un beso y felices vacaciones!